jueves, 1 de marzo de 2018

Salmos 5-8

Salmo 5
(1) = Del maestro de coro. Para flautas. Salmo. De David. =
 1 (2) Escucha mis palabras, Yahveh, repara en mi lamento,
 2 (3) atiende a la voz de mi clamor, oh mi Rey y mi Dios. Porque a ti te suplico,
 3 (4) Yahveh; ya de mañana oyes mi voz; de mañana te presento mi súplica, y me quedo a la espera.
 4 (5) Pues no eres tú un Dios que se complace en la impiedad, no es huésped tuyo el malo.
 5 (6) No, los arrogantes no resisten delante de tus ojos. Detestas a todos los agentes de mal,

6 (7) pierdes a los mentirosos; al hombre sanguinario y fraudulento le abomina Yahveh.
7 (8) Mas yo, por la abundancia de tu amor, entro en tu Casa; en tu santo Templo me prosterno, lleno de tu temor.
8 (9) Guíame, Yahveh, en tu justicia, por causa de los que me acechan, allana tu camino ante mí.
 9 (10) Que no hay en su boca lealtad, en su interior, tan sólo subversión; sepulcro abierto es su garganta, melosa muévese su lengua.

10 (11) Trátalos, oh Dios, como culpables, haz que fracasen sus intrigas; arrójalos por el exceso de sus crímenes, por rebelarse contra ti.
 11 (12) Y se alegren los que a ti se acogen, se alborocen por siempre; tú los proteges, en ti exultan los que aman tu nombre.
 12 (13) Pues tú bendices al justo, Yahveh, como un gran escudo tu favor le cubre.

Salmo 6
(1) = Del maestro de coro. Para instrumentos de cuerda. En octava. Salmo. De David. =
 1 (2) Yahveh, no me corrijas en tu cólera, en tu furor no me castigues.
 2 (3) Tenme piedad, Yahveh, que estoy sin fuerzas, sáname, Yahveh, que mis huesos están desmoronados,
 3 (4) desmoronada totalmente mi alma, y tú, Yahveh, ¿hasta cuándo?
 4 (5) Vuélvete, Yahveh, recobra mi alma, sálvame, por tu amor.
 5 (6) Porque, en la muerte, nadie de ti se acuerda; en el seol, ¿quién te puede alabar?

6 (7) Estoy extenuado de gemir, baño mi lecho cada noche, inundo de lágrimas mi cama;
 7 (8) mi ojo está corroído por el tedio, ha envejecido entre opresores.
 8 (9) Apartaos de mí todos los malvados, pues Yahveh ha oído la voz de mis sollozos.
 9 (10) Yahveh ha oído mi súplica, Yahveh acoge mi oración.
 10 (11) ¡Todos mis enemigos, confusos, aterrados, retrocedan, súbitamente confundidos!

Salmo 7
(1) = Lamentación. De David. La que cantó a Yahveh a propósito del benjaminita Kus. =
 1 (2) Yahveh, Dios mío, a ti me acojo, sálvame de todos mis perseguidores, líbrame;
 2 (3) ¡que no arrebate como un león mi vida el que desgarra, sin que nadie libre!
 3 (4) Yahveh, Dios mío, si algo de esto hice, si hay en mis manos injusticia,
 4 (5) si a mi bienhechor con mal he respondido si he perdonado al opresor injusto,
 5 (6) ¡que el enemigo me persiga y me alcance, estrelle mi vida contra el suelo, y tire mis entrañas por el polvo! = Pausa. =

6 (7) Levántate, Yahveh, en tu cólera, surge contra los arrebatos de mis opresores, despierta ya, Dios mío, tú que el juicio convocas.
 7 (8) Que te rodee la asamblea de las naciones, y tú en lo alto vuélvete hacia ella.
 8 (9) (Yahveh, juez de los pueblos.) Júzgame, Yahveh, conforme a mi justicia y según mi inocencia.
 9 (10) Haz que cese la maldad de los impíos, y afianza al justo, tú que escrutas corazones y entrañas, oh Dios justo.

10 (11) Dios, el escudo que me cubre, el salvador de los de recto corazón;
 11 (12) Dios, el juez justo, tardo a la cólera, pero Dios amenazante en todo tiempo
 12 (13) para el que no se vuelve. Afile su espada el enemigo, tense su arco y lo apareje,
 13 (14) para sí solo prepara armas de muerte, hace tizones de sus flechas;
 14 (15) vedle en su preñez de iniquidad, malicia concibió, fracaso pare.
 15 (16) Cavó una fosa, recavó bien hondo, mas cae en el hoyo que él abrió;

16 (17) revierte su obra en su cabeza, su violencia en su cerviz recae.
 17 (18) Doy gracias a Yahveh por su justicia, salmodio al nombre de Yahveh, el Altísimo.

Salmo 8
(1) = Del maestro de coro. Según la... de Gat. Salmo. De David. =
 1 (2) ¡Oh Yahveh, Señor nuestro, qué glorioso tu nombre por toda la tierra! Tú que exaltaste tu majestad sobre los cielos,
 2 (3) en boca de los niños, los que aún maman, dispones baluarte frente a tus adversarios, para acabar con enemigos y rebeldes.
 3 (4) Al ver tu cielo, hechura de tus dedos, la luna y las estrellas, que fijaste tú,
 4 (5) ¿qué es el hombre para que de él te acuerdes, el hijo de Adán para que de él te cuides?

5 (6) Apenas inferior a un dios le hiciste, coronándole de gloria y de esplendor;
 6 (7) le hiciste señor de las obras de tus manos, todo fue puesto por ti bajo sus pies:
 7 (8) ovejas y bueyes, todos juntos, y aun las bestias del campo,
 8 (9) y las aves del cielo, y los peces del mar, que surcan las sendas de las aguas.
 9 (10) ¡Oh Yahveh, Señor nuestro, qué glorioso tu nombre por toda la tierra!

Gregorio de Nisa

  San Gregorio de Nisa, también conocido como Gregorio Niseno, nació alrededor del año 335 en Cesarea de Capadocia, Asia Menor (actual Turqu...